miércoles, 27 de octubre de 2010

El cuerpo y sus fluidos


¿Por qué nos enseñan a odiar lo que sale de nuestro propio cuerpo? ¿Por qué estar manchada accidentalmente con sangre es motivo de verguenza? ¿Por qué las mujeres debemos estar depiladas, perfumadas, prolijas, peinadas de manera minusciosa, maquilladas si es posible?¿Por qué nos quieren esterilizar como si fuesemos un envase? ¿Por qué debemos avergonzarnos si estamos transpirados y un poco sucios? ¿Por qué nos enseñan a tenerle asco a todos nuestros fluidos?
Si lo que mas nos gusta cuando somos chicos es enchastrarnos, con el barro, con la arena, con la comida...Si cuando experimentamos el sexo esas son las sensaciones del cuerpo que mas nos gustan...
Todos nuestros fluidos son la expresión del cuerpo vivo. Cada uno de ellos cumple una función vital, cada pelo que hay en el cuerpo protege las zonas mas sensibles.
¿Por qué existe una obsesión por tapar todo lo que es natural?
¿Por qué nos alejan de los placeres básicos y primitivos?

martes, 26 de octubre de 2010

Pequeñas observaciones luego de pequeños viajes


I.


Hoy es 28 de Julio del 2010 y me levanté con ganas de escribir esto:

La fotografía que acompaña este pequeño texto es una escena que se me presentó en Ushuaia. Para muchos de los que vivimos en la ciudad, este tipo de cosas solo existen en los cuentos, en los sueños y en las fantasías. Pero cuando nos acercamos a la Naturaleza nos damos cuenta que ella es la principal inspiración de muchas de las creaciones humanas y que la magia existe en ella porque allí yacen los secretos mas preciosos.
Agradezco a mi familia que de niños siempre nos mantuvieron en contacto con el mundo natural, agradezco el haberme criado en un barrio de Provincia lleno de barro, plantas, arboles, chicos con quienes jugar y calles tranquilas para andar en bici.Hoy los principales entretenimientos de los niños son la televisión y la computadora. De esta manera, el intercambio se produce desde afuera hacia adentro. Todo existe en el afuera, toda la información del mundo atacándonos constantemente, nos viven dando e inventando necesidades.¿Dónde esta la valoración por la contemplación, la observación y la introspección?
Me recuerdo a mi misma en Los Acantilados, me había detenido en el medio de la vereda a observar el hermoso jardín de una casa. Estuve parada ahí un rato largo, simplemente mirando, no tenía mi cámara. Y de repente me percaté de que los dueños de la casa podrían verme y considerar mi actitud como algo extraño.¿Y si salían al jardín y me preguntaban que hacía tanto tiempo mirando su casa? ¿Debería yo dar explicaciones por estar contemplando la belleza? ¿Por qué pararse a contemplar algo es una actitud extraña que llama la atención de los otros?


II.

La ciudad desfigura la percepción del tiempo. Por qué hacer las cosas lo más rápido posible? Es casi como no hacerlas.Me rehuso, viajo hacia mi espacio primitivo y natural para aprender del fluir real. Allí, contemplo, sin juicio, todo es lo que es, y cuando el día cae, no me aplasta.
Si nado por el río respetando el fluir de las aguas, voy a poder sentirlo y recorrerlo en todo su esplendor.
Si nado desesperada por llegar a la otra orilla, con el miedo de ahogarme, lo único que voy a conseguir es cansarme.
Debo respetar el ritmo de la naturaleza.

miércoles, 20 de octubre de 2010